No hay que tener miedo a endeudarse, a la que hay que temer es a pedir dinero sin un propósito definido, y a solicitar más de lo que se pueda pagar, señala Paúl Lira, director de la carrera de Administración y Finanzas de la Facultad de Negocios de la UPC. A continuación algunos simples consejos para tomar un préstamo bueno bonito y barato:
1. Esté seguro de que verdaderamente necesita el préstamo. Lo peor que puede hacer es pedirlo sin tener un objetivo claro de para qué lo usará o aceptar una oferta de las famosas líneas preaprobadas.
2. Asegúrese de que lo podrá pagar. Siga esta simple regla: el pago mensual de todas sus deudas no debe exceder el 25% de su ingreso neto. Si excede ese porcentaje es muy probable que pase grandes apuros para cubrir sus cuotas.
3. Elija la moneda. La regla es sencilla, endéudese en la moneda en la que percibe sus ingresos, de lo contrario se convertirá en un apostador del mercado, y será muy difícil que gane.
4. Determine el plazo y la institución financiera. Para lo primero tenga en cuenta el consejo número dos, pues a mayor plazo, menor la cuota de pago. Para identificar a qué institución pedir el préstamo revise http://www.sbs.gob.pe y busque y compare tasas de interés.
5. Si tiene deudas en diversas instituciones, no es mala idea solicitar un crédito adicional para cancelarlas. Podría obtener una menor tasa (aunque no siempre es el caso). El objetivo es tener un mayor orden en sus finanzas, pagar menos comisiones aliviará su billetera.
6. No compre a plazos con su tarjeta de crédito. Pida más bien un préstamo personal. La diferencia de tasas es significativa. En la tarjeta de crédito le cobran, en promedio, 42% anual en soles, mientras que un préstamo en la misma moneda le sale a no más de 25%.
7. Si prevé problemas en el pago de su deuda, asuma una actitud proactiva. Acérquese a la institución financiera, exponga su situación y pida explorar juntos opciones (refinanciación, cuota comodín, etc.) para poder cumplir sus obligaciones.
8. Pida que le expliquen lo que firma. Ignorar no es un pecado, lo que si es imperdonable es firmar sin leer.
1. Esté seguro de que verdaderamente necesita el préstamo. Lo peor que puede hacer es pedirlo sin tener un objetivo claro de para qué lo usará o aceptar una oferta de las famosas líneas preaprobadas.
2. Asegúrese de que lo podrá pagar. Siga esta simple regla: el pago mensual de todas sus deudas no debe exceder el 25% de su ingreso neto. Si excede ese porcentaje es muy probable que pase grandes apuros para cubrir sus cuotas.
3. Elija la moneda. La regla es sencilla, endéudese en la moneda en la que percibe sus ingresos, de lo contrario se convertirá en un apostador del mercado, y será muy difícil que gane.
4. Determine el plazo y la institución financiera. Para lo primero tenga en cuenta el consejo número dos, pues a mayor plazo, menor la cuota de pago. Para identificar a qué institución pedir el préstamo revise http://www.sbs.gob.pe y busque y compare tasas de interés.
5. Si tiene deudas en diversas instituciones, no es mala idea solicitar un crédito adicional para cancelarlas. Podría obtener una menor tasa (aunque no siempre es el caso). El objetivo es tener un mayor orden en sus finanzas, pagar menos comisiones aliviará su billetera.
6. No compre a plazos con su tarjeta de crédito. Pida más bien un préstamo personal. La diferencia de tasas es significativa. En la tarjeta de crédito le cobran, en promedio, 42% anual en soles, mientras que un préstamo en la misma moneda le sale a no más de 25%.
7. Si prevé problemas en el pago de su deuda, asuma una actitud proactiva. Acérquese a la institución financiera, exponga su situación y pida explorar juntos opciones (refinanciación, cuota comodín, etc.) para poder cumplir sus obligaciones.
8. Pida que le expliquen lo que firma. Ignorar no es un pecado, lo que si es imperdonable es firmar sin leer.
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