En 1996 se instaló con su familia en Afganistán, estableciendo sus primeros contactos con el jefe de los talibanes, el “mulá” Muhammad Omar. En esos años sobrevivió a diversos atentados ordenados por el presidente Clinton. Años después, EEUU lo acusó del ataque a las Torres Gemelas de Nueva York del 11 de septiembre de 2001, donde fallecieron miles de personas.
Osama Bin Laden, el líder del grupo terrorista Al Qaeda, cayó abatido en una operación militar desplegada por fuerzas militares de Estados Unidos en Pakistán, informó el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. “América puede hacer lo que se proponga”, comentó al hacer el anuncio.
El líder fundamentalista habría sido muerto por un francotirador en las afueras de Islamabad, señalaron fuentes políticas en Washington. El presidente Obama dijo que murió a tiros en una operación sin bajas civiles ni militares.
En su declaración, el presidente recordó a los caídos en el atentado del 11 de septiembre y dijo que desde entonces su país realizó denodados esfuerzos para acabar con el cerebro del atentado más importante de todos los tiempos, que le costó la vida a unos tres mil civiles, el 2001.
Operativo CIA Obama informó que hace una semana autorizó un operativo de la CIA para dar con el paradero del principal enemigo de los Estados Unidos, operación que concluyó hoy con la noticia de la muerte de Bin Laden.
Señaló que ese acto no constituye el final de los esfuerzos para acabar con los enemigos de su país y que seguirán vigilantes para evitar que nuevos hechos de violencia lo afecten. Y reiteró que su país no es enemigo del Islam, como afirman los seguidores de la secta fundamentalista.
Tras conocerse la noticia, cientos de residentes en Washington, la capital norteamericana, se concentraron frente a la Casa Blanca para confirmar la versión y celebrar el hecho.
La operación de la CIA puso fin a una persecución de 10 años contra el hombre que nació en 1957 en Djedda, Arabia Saudí, de padre yemení y madre siria. Osama era hijo de un estibador que logró convertirse en el mayor contratista de obras de Arabia Saudí gracias a sus relaciones con la familia real.
Fue a partir de 1979, que Osama Bin Laden empieza a dar importancia a la religión islámica, en reacción al acuerdo de paz entre Egipto e Israel. Tras la revolución islámica en Irán y la invasión soviética a Afganistán, Osama abandona su empresa para integrarse en el movimiento armado que combatía a los invasores rusos.
En 1980 empieza a reclutar guerrilleros proafganos y establece sus primeros campamentos. Fue entrenado por la CIA y aprendió a mover dinero a través de sociedades fantasmas y paraísos fiscales; a preparar explosivos; a utilizar códigos cifrados para comunicarse y a ocultarse.
En esos años, los Estados Unidos aportaron cerca de tres mil millones de dólares a la resistencia afgana y cerca de 35.000 combatientes, procedentes de 40 países, fueron formados como guerrilleros en los campos de entrenamiento situados a lo largo de la frontera con Pakistán.
En 1988 funda Al Qaeda, La Base, en árabe, una organización conformada por veteranos de la guerra de Afganistán. El grupo contaba con bases en Argelia, Uzbekistán, Siria, Pakistán, Indonesia, Filipinas, Líbano, Irak, Kosovo, Chechenia, Cisjordania y Gaza.
La ruptura con sus aliados norteamericanos se produjo en 1990 cuando, en su combate contra Irak, EEUU desplegó tropas en Arabia Saudí, tierra de los lugares sagrados musulmanes de La Meca y Medina.
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